17 nov 2014

Caminos.


Foto propia tomada en Algarrobo.

Algunos están en el camino sin planes,
piensan en armar plan como vaya viniendo.
De las cosas que te pierdes por no saber,
por subir la nariz un poco más arriba de donde se debe.
Estamos claros en algo, uno tiene sus cosas y los demás las suyas. 

No hay que demostrar nada en la tarea de ser. 
Esto es un viaje de deshacerse del mal humor,
de desgastarse por la vida complicada que te salpica,
cuando los demás meten cucharadas en las decisiones propias.
Que carrizo hacemos pensando tantas tonterías.
Mientras matas horas que deberías dedicarle a escribir manuscritos
en tu derecho de hacer viaje.
Nada debería ser forzado, nada puede hacerse de la nada.

Que complicado es no ser natural.
Que complicado ponerle la boca a todo.
Que complicado no ser más suelto.
Yo que soy la que pinta,  la que se adapta o muere,
la que piensa que puede, la que lo hace a su modo o de resto se aburre.
La que añora con tener cosas básicas, un cuarto con terraza,
una taza de café. Todo lo que se haga a mano.
La que espera que las cosas a su alrededor se vean bien.
Sí. Ya sé que no soy la lanzada, ya sé que no fumo
y no me mortifico por eso.
Ya sé que soy y no tengo idea si lo desagradable se me nota mucho.