14 may 2015

Madrugada

Ana Brett 2012 Grafito / Parte de una página de "El Cuento de un Viernes"

Muchas noches mi cama se hacía pequeña y mi mente reproducía una escena de ojo de pez, la habitación se volvía angular o yo parecía salirme de mi misma. El sonido del aire acondicionado se hacía más lento, sentía un tambor que golpeaba en el pecho. Llegue a pensar que era taquicardia que me encontraba en una dimensión ajena. Mi hermana dormía a un lado, la penumbra de la niñez me sumergía. Era un dialogo con la madrugada tal vez, una escena que se repetía hasta quedarme dormida. No era capaz de poner los pies en el suelo frío, ni asomarme a esa ventana que ofrecía otra proporción de sonidos extraños. Clara despierta, ¿escuchaste eso?, pero Clara dormía, pues era ella la que veía espíritus mientras yo veía dimensiones.